LA SOCIEDAD CIVIL ES LA QUE FUNCIONA

Se empiezan a ver colas para recibir alimentos ante las Cáritas, Bancos de Alimentos, Parroquias y otros Centros de carácter social, sobre todo, en las grandes ciudades.

Caritas Diocesana esta dando ayudas directas a través de transferencias y tarjetas monedero a aquellas personas en situación difícil.

El Gobierno, mientras nos habla de “escudo social”, de millones de euros y de otras ayudas, lo hace como si fuera dinero del propio Gobierno, cuando es de los contribuyentes y en este caso ni siquiera eso, porque son fruto de nuestra deuda pública y de ayudas de la UE.

Si no fuera por la sociedad civil, no tendríamos mascarillas, ni trajes y la gente tendría dificultades para poder comer.

El Gobierno llego tarde a la pandemia, llego tarde a los ERTES, es más, ha tenido que pedir ayuda a los bancos para que lo adelanten unos días, es decir, llegó tarde a casi todo.

No gestionan bien, pero son capaces de aumentar el gasto improductivo, bueno, productivo para sus amigos.

El gasto en asesores de Presidencia del Gobierno se disparó un 46 por ciento.

El actual Ejecutivo, según un informe del diario ABC dedica 75 millones de euros al año en salarios, más 15 millones de Seguridad Social, todo ello, sin contar los gastos y cargos de otras administraciones, un insulto a la decencia.