El cariz que toman algunos acontecimientos en algunas ciudades españolas y en otros puntos de Europa, persiguiendo a las comunidades Judías, son todo un atentado de máxima gravedad, contra los más básicos derechos humanos.
Un atentado, perpetrado por elementos que quieren romper la convivencia en el mundo libre, una confluencia de intereses de dictaduras como Irán y elementos de la extrema izquierda, que ha perdido su razón de ser y existir, sólo contemplan la destrucción social, la ruptura de las sociedades y su propia dictadura, para acabar con la libertad individual de los seres humanos.
El Gobierno de España, tiene en su ala más izquierdista, a personas incompetentes, llenas de maldad y de ganas de destruir la convivencia entre los seres humanos.
Son incapaces, de hacer y pensar algo bueno para el bien común, y casi siempre están de lado de los malos; eso sí, sus cuentas corrientes están bien saneadas a costa de los impuestos de los ciudadanos, son personas extractivas, que mezclan su gran ignorancia con grandes dosis de maldad, con un único objetivo: vivir bien y someter a los demás.
La sociedad española y la occidental, tiene que darse cuenta, que hay que reaccionar ante este tipo de personajes, que sólo generan odios y divisiones, no hacerlo es toda una irresponsabilidad, como la que tiene el señor Sánchez teniendo en su Gobierno a personas, que no hace tanto decía que le podían “quitar el sueño” y ahora, les tiene en el Gobierno de España, porque realmente el Presidente, está desnudo políticamente hablando, sin ellos no es nada, nada.
Y a todo ello lo llaman “progresismo”, cuanto tenemos que aguantar los españoles para que uno pocos vivan a costa de todos.