SENSATEZ Y MODERACIÓN

Nadie en su sano juicio, puede creerse que las medidas económicas de algunas personas que han defendido la catástrofe humanitaria de Venezuela, puedan tener solvencia y credibilidad.

El comunismo, sólo puede anidar en momentos de desesperación y de desintegración social.

Una sociedad justa, con riqueza bien administrada es el mejor antídoto contra la dictadura comunista.

Por lo tanto, los organismos internacionales, que son los que nos tienen que ayudar, pedirán garantías y condiciones a esa ayuda, para que no se dilapide en asesores, subvenciones a organizaciones amigas y en gasto público clientelar.

La sensatez y la moderación, están en el polo opuesto a los radicales y ello es algo que se puede sacar como conclusión a poco que se conozca la historia.

Son tiempos para personas generosas, personas de bien, dispuestas a inmolarse políticamente y dispuestas a decir la verdad siempre a un pueblo demasiado acostumbrado a la mentira.

Sólo desde el trabajo bien hecho, desde la generosidad, la unidad y el sentido común saldremos rápidamente de la situación actual, aunque algunos defiendan

métodos fracasados, aderezados con recorte de libertad