Algo esta fallando y no se explica o lo que sería mucho peor, nos están engañando. Publica el diario EL Mundo que tras seis meses desde el inicio de las vacunas los datos de incidencia del virus en España, es curiosamente diez veces mayor que en las mismas fechas del pasado año 2020.
Por otro lado, el caso de Chile demuestra que las vacunas no son de momento el remedio aunque registra uno de los índices mundiales más altos de vacunación.
Ahora hay que escuchar declaraciones tan desvergonzadas como las realizadas por la alta responsable de la coordinación de la lucha contra la pandemia en la OMS al decir los siguiente, en referencia a la alta tasa de casos en la país sudamericano. “Para Chile y para todos los países deben tener en cuenta que las vacunas son una herramienta muy poderosa, pero también se necesitan aplicar otras medidas que puedan prevenir infecciones, reducir la propagación y que aquellos que se contagien no desarrollen una enfermedad grave y mueran” , palabras de la jefa de la célula técnica contra la COVID de la OMS María Van Kerkhove.
¿ En que quedamos ? ¿Sirve la vacuna? ¿No era la solución?.
Habría que recordar como importantísimos científicos, son censurados por estar en contra de este tipo de vacunas y la decisión en su día de algunas farmacéuticas de suprimir los ensayos en su última fase por no ver un beneficio claro en la prevención de la enfermedad.
Los datos por el momento, dan la razón a los críticos que además han advertido de la posibilidad de que las vacunas contribuyan a la existencia de nuevas variantes.
Habrá que seguir esperando y confiar en que se nos dice la verdad, porque de lo contrario muchas instituciones y personas deberán de dar cuenta en los Tribunales.
Por el bien de todos, esperemos que lo que ocurre en Chile no se repita en otros lugares y de verdad no sea una disculpa para realizar un control sobre la sociedad.
Deseamos fervientemente de cara al invierno, que el proceso de vacunación sea efectivo, por el bien de todos, aunque debemos de ser optimistas, porque según últimos estudios procedentes de Italia, la carga viral desde el pasado mes de marzo y de forma continuada esta disminuyendo de manera considerable, lo que nos debiera hacer ser optimistas.