Resulta, que los que miran hacia otro lado, cuando se habla mal de España, se desprecia su bandera, o incluso pactan con aquellos que demuestran querer destruir la unidad nacional, nos hablan ahora de patriotismo, porque una importante empresa como es Ferrovial, puede trasladar su sede social a Ámsterdam.
Dentro de la UE, cualquier ciudadano y cualquier empresa puede marcharse a donde quiera dentro la Unión, por lo tanto Ferrovial, esta haciendo nada más que uso de un derecho legítimo.
Por otro lado, si está empresa que tiene el ochenta por ciento de su negocio en el extranjero, considera que para su estrategia comercial, es mejor situarse en Holanda, nada debe de decir el Gobierno y mucho menos de forma lamentable como lo ha hecho.
No se puede hablar de los “señores del puro”, inventarse historias para no dormir, freír a impuestos y luego hablar de patriotismo.
El patriotismo, hay que tenerle, gastando sólo lo necesario, no creando “chiringuitos” innecesarios, no gastando en asesores ni en Ministerios inútiles, no utilizando el Falcón a todas horas y no dando subvenciones a otros países, como si aquí nos sobrase el dinero.
Por lo tanto, menos quejas y más humildad en el trato a las empresas y a los ciudadanos en general, porque la soberbia es muy mal consejera.