El actual Gobierno de España, tiene la extraña virtud de crear problemas innecesarios en casi todo lo que toca.
Dentro de los funcionarios de alto nivel de la Administración, ha logrado tener a casi todos los gremios en su contra, debido al trato y a las medidas tomadas en diferentes sectores.
Así, dando un repaso superficial, tiene a la una parte mayoritaria de los Jueces preocupados por las continuas criticas que desde diferentes miembros del Gobierno se vierten, cuando las decisiones judiciales no son favorables a los intereses del Gobierno.
Tienen a la mayoría de los Fiscales, en estado de “shock”, por la decisión de apoyar al Fiscal General y no cesarle en un momento, en que por primera vez un Fiscal General, es investigado por el Tribunal Supremo.
Están también enfadados una parte de los Inspectores de Hacienda, por diferentes motivos, pero sobre todo, por la falta de seguridad Jurídica y cambios de opinión sobre la marcha.
Tienen enfadados a los Diplomáticos, a los que se les cesa, por cualquier pretexto y según se dice, se ha creado una especie de pánico colectivo en los miembros de la carrera Diplomática.
Tienen en general, en “vilo” a los funcionarios desde hace varios meses, por la continuidad o no de Muface.
Tienen también en “ascuas”, a una parte de los Médicos, por la intención de incluir en el nuevo Estatuto Marco, que los Jefes de Servicio, no puedan dedicarse a la sanidad privada en su horas libres.
También tienen profundamente “enfadados”, a una parte del Ejercito, por el trato recibido, durante su estancia en Valencia, para ayudar a superar los graves problemas generados por la “Dana”; al parecer, comida escasa, acomodación casi imposible para descansar de las largas jornadas, según diferentes denuncias.
Podíamos seguir, con más colectivos, pero creo que ya es suficiente para darse cuenta de la falta de criterio y sentido común en la toma de decisiones.
Pero es que en realidad, todo ello puede ser hasta lógico, ya que dicho con todo respeto, la mayoría de los miembros de este Gobierno, no habían gestionado en su vida ni un “kiosco de pipas” y se creen en algunos casos, los inventores de un nuevo mundo.
Estamos apañados.