Después de la lamentable y vergonzosa sentencia del Tribunal Constitucional, sobre la amnistía a los independentistas, afectados en el intento de «golpe de Estado» en Cataluña, los españoles de bien, la inmensa mayoría, tenemos que soportar y escuchar las declaraciones de algunos de los afectados u condenados en su día, que dicen haber redactado partes de la propia ley de amnistía, ratificada por el TC.
Es el colmo de los colmos, los imputados, en una gravísima causa colaboraron con el Gobierno, para adaptar a sus intereses, la redacción de ley que les perdonaría de toda responsabilidad.
En realidad, es corrupción en vena, que deja al Gobierno fotografiado en su falta de dignidad, de aprobar una ley a cambio de unos votos, con el fin de seguir en el poder.
Esto tiene nombre, digan lo que digan los Tribunales, se llama corrupción, porque se legisla con el objetivo de mantenerse en el poder, en una especie de cambio de cromos.
Para colmo de males, los condenados en su día, no muestran arrepentimiento alguno, más al contrario, algunos de ellos han manifestado estar dispuestos a repetir algo similar.
Espero que la sociedad española y seguro la historia, juzgará duramente tanta indignidad y maldad.