Indican las agencias internacionales, que Venezuela vive una situación limite con serio riesgo de hambruna.
La falta de alimentos y de poder económico para adquirirlos por parte de más del ochenta de la población, la falta de combustible en unos de los países con más reservas de petróleo del mundo y los estragos derivados de la pandemia del Covid19, hacen que la situación en algunos lugares de aquel país sea dramática.
Mientras, el gobierno corrupto de Maduro, se dedica a encargar armamento a Irán y a intentar sacar oro a otros países.
Es un “escandalo”, el silencio cómplice del Gobierno de España y la falta de energía la propia UE para tomar medidas drásticas al respecto tanto en ayuda humanitaria controlada y directa como acciones políticas de mayor aislamiento de un régimen implicado posiblemente en delitos de lesa humanidad.
Aquellas personas que no condenan este tipo de regímenes con colaboradores indirectos de toda una tragedia y debieran de ser también aislados en sus responsabilidades.
Ante la falta de libertad y la “barbarie”, no puede haber silencio ni equidistancia, sólo condena y denuncia .