Hemos visto como en el estadio de Wembley 60.000 personas sin mascarilla en lo que debe de ser la normalidad.
Mientras en España, algunos políticos en un ridículo o en una ignorancia culpan a la falta de mascarillas en la calle la posibilidad de nuevas olas.
Son “olas” de PCR en su gran mayoría asintomáticos, personas que no están enfermas, por mucho que manipulen.
Estamos ya instalados en la “locura”, nadie niega que el virus ha sido muy dañino el pasado año los meses de febrero marzo y abril, pero ahora no hay motivo alguno para parar la vida y poner puertas al campo.
Si el índice de fallecimientos lleva meses siendo normal e incluso inferior a a los últimos años, los hospitales no están colapsados, que se pretende con el miedo de cepas y más “zarandajas”.
Por otro lado se ha engañado a las personas y se las ha dicho que la vacuna inmuniza, cuestión que no es verdad, porque están entrando en los hospitales más personas vacunadas que no vacunadas, lo que no quiere decir que la vacuna no sea positiva en algunos casos, por lo tanto que no mientan y utilicen la palabra inmunizar.
Es decir, se han metido en un “lio” de mentiras o medias verdades, donde una tapa a la otra y así hasta que alguien diga basta.
Se han perdido 22 millones de empleos en los países de la OCDE y 114 a nivel mundial, muchos países han vuelto a la normalidad y en España, sólo se piensa en restringir movimientos y actividad, se han vuelto “locos”.