La sociedad española, se está haciendo “resistente” a los múltiples casos de corrupción.
Son tantos los escándalos, que como sucede en algunos países con altos grados de corrupción, que ya no afectan y se reciben como algo normal.
Es decir, nos estamos haciendo inmunes a la ética, moral y honradez.
Todo parece dar igual, a una sociedad que sin una base ética profunda, lo único que parece pretender, es el sobrevivir en medio de esta “jungla” del sálvese quién pueda.
En toda esta aparente indiferencia, han colaborado de manera fundamental, una parte de los medios de comunicación, que en vez de destacarse por crear criterios firmes y positivos se han dedicado a justificar o “tapar” una forma de proceder lesiva para el bien común y a medio plazo de consecuencias muy graves.
¿Qué tiene que pasar para que las cosas cambien políticamente en España?
Me gustaría poder contestarme, pero casi nada ya hace efecto sobre una sociedad desmoralizada y sin criterio.
Lo único que nos puede salvar de tanta miseria moral y política es la confianza en Dios, que no abandona a sus hijos.