LA PREPOTENCIA ES MALA CONSEJERA

La prepotencia es siempre mala consejera y en un cargo político, suele ser todavía más definitorio.

Acabo de leer, que la dirigente del Ayuntamiento de Madrid, Andrea Levy, al parecer, se ha marchado de un acto del Museo del Prado en el que estaba el Don Felipe, por no estar de acuerdo con el protocolo, cuando al parecer la señora Levy iba el representación del Alcalde.

Con razón y sin ella, la señora Levy va a en representación de la ciudad de Madrid y no es nadie para marcharse de una recepción, a la que asiste por el cargo que desempeña, para ser tan joven, siempre ha demostrado esta señora ir de sobrada y mejor sería que fuera un poco más humilde.

El alcalde de Madrid, debiera de obligar a esta concejala a pedir perdón a los madrileños por su actuación.

El PP en este caso, debiera de analizar bien que tipo de dirigentes tiene en altos cargos, pues con actuaciones prepotentes no se puede ir a ninguna parte.