Los medios de comunicación, siguen siendo ,(casi todos) máquinas de meter miedo sobre el Covid-19, sin revelar que desde hace varios meses el número de fallecidos es inferior a los últimos años.
Da igual, el COVID-19, es una falsa religión, porque existió efectivamente y causo muchas muertes y muchos dramas en los meses de febrero, marzo y abril de 2020, después, para evitar dudas les invito a que entren en las páginas del INE y comprueben hasta el presente los datos.
Nunca en la historia del miedo, del terror, sembrado desproporcionalmente, ha salido nada bueno, ni ahora podrá salir tampoco nada bueno.
Un enfermedad que según 61 estudios(74 estimaciones) realizada en diferentes países estiman que la tasa de letalidad por la infección oscilaron entre el 0,00% y el 1,63% y la media de letalidad en 51 lugares fue 0,27.
Este estudio realizado por la Universidad de Standford, es un aprueba irrefutable de la exageración propiciada en España y en otro países de manera escandalosa.
Mientras, no se habla de economía, de miseria, de desesperación, de perdida de oportunidades y de libertades.
Es como si una gran parte de la sociedad, haya perdido el juicio a través de la mayor manipulación de la historia.
No dicen de donde viene el COVID-19, no se advierte a China que debe de colaborar, pero se puede mentir, quitar libertades y algunos “forrarse” aprovechando una pandemia que si existió y en la que murieron miles de personas, muchos por desatención y malos tratamientos, otra cuestión que debiera investigarse y no cerrar bares, comercios, quitar libertades y llevarnos a la ruina.