Estamos viviendo en medio de una niebla muy intensa, provocada artificialmente, aprovechando la pandemia voluntaria o involuntariamente, para llevar a la sociedad a un destino desconocido, dirigido por intereses casi criminales, pues están basados en la mentira, en la exageración y en el miedo.
Ninguna persona de bien, debe de colaborar con tan siniestros objetivos.
No es posible que de la noche a la mañana, exista desabastecimiento de productos básicos, subidas de precios provocadas por intereses ocultos.
Con grandes reservas de petróleo en el mundo, resulta que de repente en China hay provincias en las que se raciona el combustible.
En Estados Unidos, según recoge FOX, pude haber hasta escasez de pavos para celebrar del día de acción de gracias, salsa de tomate, comida para mascotas y otros productos.
Ahora se entiende que hace dos meses la tenebrosa Vicepresidenta Kamala Harris, invitará a los norteamericanos a que hicieran sus compras de Navidad.
No tengo dudas de que todo ello es provocado, lo que no atisbo a saber son los motivos, como también es provocado el intento de controla de la humanidad a través de la vacunas y los pases sanitarios y la ocultación de informaciones controvertidas para el poder, de manera sistemática por parte de los grandes medios mundiales.
¿Qué pasa en China? . Según informaciones que confirmo, directas de tripulaciones españolas en su viajes al país asiático, los controles aeroportuarios, hace pocas horas eran exhaustivos, tres horas tardan las tripulaciones en llegar desde el aeropuerto de una gran ciudad cuyo nombre no digo por seguridad, hasta el hotel, debido a los numerosos trámites y controles, hasta seis.
Debe despertar la sociedad y pensar que demasiadas cosas “no cuadran”, que la mentira se ha instalado y que sin duda hay un intento global de imponer una especie de dictadura encubierta sobre los seres humanos y que unas “elites” escogidas controlen todo.
Cuando se revelan datos de los profundos intereses en China del fondo de inversión Black Rock, con participación cruzada en grandes empresas, entre ellas medios de comunicación de todo el mundo incluida España, se “ponen los pelos de punta”.
La Administración Biden, no es ajena a estos intentos de cambiar la sociedad, así por ejemplo la directora de personal de la presidencia de Joe Biden, Cathy Rusell, es la esposa del presidente de Black Rock.
Son tiempos muy “oscuros” estén atentos, piensen y no confíen y si son creyentes por favor manténganse en oración, para buscar la verdad.
El Señor Dios, no nos abandona.