Un país con la renta per cápita que tiene Rusia, no puede ser una potencia mundial, desde el punto de vista militar, aunque es verdad, que el tener armas nucleares la cuestión varia, pero no tanto como para estar aquí en occidente de repente atemorizando a todas horas.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia, es sin duda un acto criminal, pero en realidad sólo está demostrando la impotencia de un gran país, con otro mucho más pequeño y débil, como es Ucrania, lo que sólo hace demostrar el fracaso durante años de las políticas comunistas y de los años posteriores donde unos pocos se han enriquecido de manera extraordinaria, mientras el resto del país seguía en la pobreza.
En Rusia, sin corrupción casi nada funciona y ahora se puede comprobar con el material bélico ruso, en mal estado de mantenimiento y en parte obsoleto.
Por todo ello, es obvio que los países occidentales, están sobreactuando, de manera desproporcionada y aprovechando para vender material militar y por otro lado culpar a la guerra de sus “desaguisados” económicos después de la mal gestión de la pandemia.
Rusia, no está en condiciones de casi nada, porque la corrupción y los problemas sociales son de tal magnitud, que sólo por tener armas nucleares, puede suponer cierto riesgo.
El que Vladimir Putin, se un dirigente criminal, no es óbice para decir que se está utilizando el sufrimiento del pueblo de Ucrania, por parte de los países occidentales, paseándose por Kiev dirigentes que sólo buscan su popularidad en los respectivos países y que utilizan lo que fuere sin escrúpulo por sus minutos de fama.
Los dirigentes rusos deberán ser juzgados y sobre todo Vladimir Putin, pero occidente no tiene autoridad moral para casi nada.