No hay institución por medio que no toque para conseguir una especie de dictadura, camuflada como democracia, donde instalar una especie de régimen propio, mientras la sociedad asiste anestesiada y ajena a tanto dislate.
Pedro Sánchez, ajeno a toda pluralidad y a todo interés por gobernar para todos, prácticamente lámina a todos los miembros del Comité de Bioética que emitieron un informe contrario a la ley de eutanasia, aprobada recientemente.
Como recoge el digital EL DEBATE, sólo permanece un experto, de los que estaban hasta ahora, se trata de Leonor Ruiz Sicilia, psiquiatra que emitió un voto particular sobre está cuestión.
La asociación NEOS, en un comunicado, denuncia la extrema gravedad de lo sucedido y señala las malas artes del gobierno para realizar este cambio en plena operación salida de vacaciones.
Así NEOS considera que Pedro Sánchez, responde a su plan de establecer un “implacable desorden social”.
Más allá de las ideología políticas, la acción del gobierno parece más estar encaminada a ser agentes del mal y de la división y no de las búsqueda de respeto a la pluralidad y la unidad.
Decía Abraham Lincoln, décimo sexto presidente de los Estados Unidos:” Me siento bien cuando hago el bien y mal cuando hago el mal”.
No se sentirá con sus mentiras y sus engaños el señor Sánchez, pero visto lo visto no creo que muy bien.