LA FALTA DE DEMOCRACIA INTERNA EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Los partidos políticos, se han convertido casi todos en un fin en si mismo; es decir, no les interesa nada más que ganar elecciones para estar en el poder y para ello son capaces casi de cualquier cosa.

Lo estamos viendo a derecha e izquierda, la defensa del bienestar de los ciudadanos y de la verdad, ha desaparecido por completo y son una “maquinaria” de poder, donde una serie de personas, reciben magníficos salarios y se dedican con perdón a “tocar las narices” a los ciudadanos.

No existe democracia interna en los partidos políticos, sino al contrario, hay que seguir las directrices que marca un pequeño grupo de poder.

Un ejemplo claro, lo tenemos en la expulsión de Redondo Terreros, historia viva del socialismo a través de su padre y su abuelo, una persona seria y que nunca se ha callado; los que se llaman demócratas le han puesto en la calle, sin escucharlo.

El PSOE, es una maquina de poder menguante y por ello están preocupados, mostrando un “totalitarismo” que no tiene nada de democrático.

En el PP, tampoco crean, que hay mucha democracia interna, y se comportan con todo aquel que disienta también de manera desagradecida, aunque la persona en cuestión haya tenido una larga trayectoria de buenos servicios.

Es decir, lo partidos políticos tienen comportamientos en algunos aspectos, similares a la “sectas”, son incapaces de reconocer sus errores, sus miserias y sus mentiras, su obsesión por el poder y los buenos salarios, les hacen ser como grandes agencias de colocación de personas y no de defensa de los intereses reales de los ciudadanos y sobre todo de la verdad, una palabra, que parecen desconocen.