Me empiezo a preguntar sin maldad, que de momento el cambio de Gobierno, no se nota en Cantabria; no digo que a futuro no se llegue a notar, pero de momento, nada de nada.
El nuevo Gobierno del PP, recibido con mucha ilusión, creo que fue votado para hacer las cosas de forma diferente, es decir otras políticas, porque de lo contrario se hubiera ratificado al anterior bipartito.
Pero, en estos comienzos, nos estamos encontrando, que prácticamente se siguen las mismas políticas, menos la magnifica idea de querer bajar impuestos.
Por lo demás, se sigue con el proyecto de La Pasiega, sin saber si vamos a tener lo fundamental para el mismo, el enlace ferroviario, en educación, parece que no se quiere tocar casi nada, otro tanto ocurre, con la salida del Corredor del Atlántico, un despropósito total del anterior Gobierno bipartito, que el actual, parece no rectificar, otro tanto ocurre, en el número de asesores y cargos de confianza, que no disminuye, manteniéndose prácticamente el mismo número.
En definitiva, si esto sigue así, nos podíamos haber evitado las últimas elecciones regionales y que hubieran seguido los anteriores políticos al mando.
Entiendo que gobernar es difícil, en una sociedad con muchos intereses de todo tipo, pero la ideología, el compromiso con los electores, debieran de ser aspectos intocables y no hacer sentir al votante engañado.
Si los ciudadanos, votaron diferente, en las últimas elecciones regionales, sería por algo, no creo que por capricho, por lo tanto, es incomprensible dar al menos la sensación, de seguir con las mismas políticas y con el nombramiento de algunos asesores, que por cierto tuvieron un importante protagonismo en el Ejecutivo anterior, y que cambiaron de camiseta de la noche a la mañana.
Cuando una parte de los ciudadanos, no entienden algunas decisiones, es que algo se está haciendo mal.
Queda tiempo para rectificar, pero para ello hace falta humildad y escucha; de momento empiezo a tener serias dudas de que se escuche. Tiempo al tiempo.