Es muy difícil buscar la moderación, el encuentro político; en la situación que vivimos en España.
No por ello, debemos dejar de intentarlo, pero el proceso de radicalización, lo que precisamente trata, es evitar los acuerdos y establecer un sistema casi dictatorial.
España, parece haber sido elegida por los dirigentes del foro de Sao Paulo, y otros personajes como Soros, como elementos de desestabilización en Europa, a través del “virus” independentista. En realidad, todo este proceso, trata de hacer coincidir diferentes intereses en un mismo objetivo: la desestructuración de España y posterior de Europa.
En “motor” de todo el proceso es la mentira y el engaño permanente, a base de repetición de lemas, que aún siendo falsos impactan en una parte de la sociedad.
A medida, que se acerquen las elecciones al Parlamento Europeo, se acentuará aún más una especie de “presión”, hablando de ultraderecha y de peligros imaginarios, que evidentemente son absolutamente falsos.
El objetivo, es que nada cambie y si cambian sea a peor, para que ciertas elites globalistas, con la ayuda de una izquierda menguada puedan seguir con sus intereses de empobrecer a las clases medias y conseguir así una sociedad subsidiada y sometida.
La realidad: queridos lectores es muy preocupante y sólo si el pueblo llano reacciona, piensa por si mismo, defiende las libertades con “uñas y dientes”, se
podrá ganar la batalla de la libertad, porque ni más ni menos, nuestras libertad está en juego.