Estamos llegando a unos niveles insólitos de estupidez humana. Resulta que la Asociación de familias Vagara de LLodio (Álava), acaba de denunciar ante el ayuntamiento de dicha localidad que el claustro de profesores de la escuela pública Latiorro, ha tomado la decisión de que desaparezca la tradición de 25 años de instalar un Belén en el exterior del centro escolar realizado de piezas de madera a tamaño natural que preparan los alumnos de Religión.
Las familias consideran que la actitud de los profesores es sectaria y será llevada al Consejo Escolar del centro en una próxima reunión.
Es una prueba más de la persecución por parte del nacionalismo radical y de una parte de la izquierda a todo lo que sea cristiano y muestra una necesidad de reacción social, ante este tipo de atropellos a la tradición de un pueblo y a sus valores, aduciendo una falsa laicidad.
Por otro lado, recogía OK Diario que la capilla de la terminal T4 se va a trasladar el semisótano, mientras la musulmana se queda en la planta principal.
No son tiempos fáciles para la fe cristiana, pero no por ello debemos de quedarnos con los brazos cruzados. Es más creo que son tiempos para la acción y para plantar cara ante tanta cobardía y tanto miedo, cada uno desde su campo debe de contribuir a defender la fe y los valores cristianos, no hacerlo no puede ser una opción.