El acoso mediático a la Presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, esta resultando un fiasco para la progresía y para los medios colaboradores.
Seguro, que la Presidenta de la Comunidad de Madrid ha cometido muchos errores, claro que si, pero también ha tenidos éxitos notables como el hospital de IFEMA, la consecución de material en los momentos más difíciles y el confinamiento de las residencias días antes que lo ordenará en Gobierno, lo que evito que la tragedia de las residencias hubiera sido aún mayor, no quiero ni pensar lo que hubiese sucedido.
La señora Díaz Ayuso, es perseguida porque ha tenido el valor de hacer frente a un Gobierno que se cree que gobierna una nación totalitaria, por su valentía sufre insultos de todo tipo, que si hubieran sido de otro color ideológico se hubieran calificado como de “machismo”.
Si, llama la atención que las feministas callen cuando recibe tantos insultos personales, una persona como la Presidenta, que parece navegar sola en una embarcación endeble, en un mar de tiburones.
La propia apariencia de debilidad y la manipulación de la radicalidad de un sector importante de la izquierda, ha repercutido de manera importante en su despegue en las encuestas, en medio de la desesperación de los “gurus” de la Moncloa, que a este paso debieran de retirarse al desierto a meditar.
Todo muy “chusco” y lleno de mentiras, el acoso político salió mal muy mal al señor Sánchez, que no pudo controlar su soberbia.