LA CLAVE ES LA CENTRALIDAD

 

 

Después de la Segunda Guerra Mundial, la socialdemocracia realizó un importante papel en Europa , principalmente en Alemania en materia social y de derechos, bien en compañía de otros partidos, como la democracia cristiana y liberales o bien

gobernando sin coalición.

Hoy, en el mundo actual, otros partidos del centro y de la derecha, defendiendo también, principios básicos como los derechos laborales, la igualdad de oportunidades, la libertad y otros; han dejado sin margen ideológico al socialismo democrático.

Al quedarse sin ideas claras , se dedican como “pollo sin cabeza” a defender de manera un tanto aparatosa el ecologismo, un feminismo también muy exagerado y todas aquellas causas que marquen diferencias e incluso controversias.

Esta búsqueda de espacio y falta de sintonía, esta permitiendo su radicalización en vez de servir a los ciudadanos como puente y nexo de unión y defensa de derechos y deberes.

En el fondo, es una involución de casi un siglo, hacia posiciones trasnochadas y en algunos casos incoherentes y un abandono de la centralidad.

Hoy por hoy, se pueden y se deben defender los derechos sociales, a las minorías

la educación para todos y otras muchas conquistas de mitad del siglo XX, pero

se esta demostrando que otras fuerzas políticas han asumido, incluso mucho mejor esos retos, uniéndolos al de una buena administración de lo público, cuestión en la que la socialdemocracia ha fracasado, no tanto en los años setenta y principio de los ochenta, sino después, como hemos visto en España, Francia, Reino Unido y otros países.

Como respuesta a la radicalización, en un efecto acción-reacción, se ha producido también el nacimiento de fuerzas de derecha radical, que tienen

la sensación de un retroceso en el ámbito de las libertades, lo que favorece la bipolaridad que tanto perjudica a la convivencia.

Se echa en estos momentos en falta en el viejo continente, dentro del socialismo democrático, a líderes como Tony Blair, Felipe González e incluso Françoise Mitterrand; personalidades que colaboraron a labrar la unidad y el progreso de Europa, desde el realismo, la sensatez y la moderación.

 

 

SERÁ INEVITABLE

 

 

Se ha abierto la puerta y no creo que será posible cerrarla rápidamente. La Fiscalía de Francia, acaba de anunciar la apertura de una investigación sobre la gestión pública de la crisis sanitaria de la pandemia del Covid 19 en el vecino país, en el que se investigará varios delitos entre ellos, el de homicidio involuntario.

En Italia, la fiscalía de Bérgamo, ha citado nada menos que la Primer Ministro y otros altos cargos, para que den cuenta de la gestión de la pandemia y el cierre de comarcas en esta zona de Italia.  

La Fiscalía General del Estado, no podrá ahora en España, frenar la presión abierta y que en un estado de derecho exige claridad e imperio de la ley.

Si por desgracia se produce un accidente de tráfico; la justicia después de los oportunos informes juzga al conductor responsable, si se derrumba por fatalidad un puente en construcción, se busca la responsabilidad de los ingenieros y de la empresa y el contratista y así se sucesivamente en diferentes facetas de la vida.

Si en España, con la gestión que se ha realizado del la pandemia, nadie asume responsabilidades judiciales, me pregunto que con que tipo de legitimidad se puede pedir responsabilidades en otras facetas.

Es un escándalo en si mismo, que desde un organismo oficial, se tarde en dar a

la justicia una serie de documentos solicitados por la instructora de un caso y tenga que reclamarlo, cuando desde los organismo públicos se debiera de ser ejemplar, en cualquier tipo de actuación o requerimiento de los Tribunales.

Los políticos, también son iguales ante la ley; a no ser que sólo lo sean aquellos adversarios de la fuerza política de turno.

Esto es una democracia, aunque algunos den la sensación de no respetar el fondo y la forma de las leyes que nos hemos dado.

En cualquier caso, como tantas otras veces, el ejemplo vendrá de fuera y será inevitable por mucho que intenten frenar, que se investigue la desastrosa gestión de la pandemia en nuestro país.  

 

 

 

LA PISTA CHINA

 

 

Cada vez ofrece menos dudas y la sospechas, son más que sospechas, sino datos que pueden llevar a lo que hasta ahora suponía una seria conjetura.

Según estudios de la Facultad de Medicina de Harvard y de la Universidades de Salud Pública de Boston y de Niños de esta misma ciudad, la pandemia de coronavirus se desato en China mucho antes de lo que afirmado por las autoridades de aquel país.

El estudio realizado por la Universidades indicadas, en base a fotos de satélite y

otras informaciones, señala que la pandemia puedo iniciarse en el mes de octubre del pasado año.

En el citado mes los hospitales de esta zona desarrollaban una inusitada actividad, con los aparcamientos de vehículos abarrotados, según recogen las fotos de satélites, por otro lado, la red registraba de manera muy especial la búsqueda de las palabras tos y diarrea, dos síntomas del covid19.

Por si fuera poco, análisis realizado en las aguas residuales de Barcelona el 15 de enero detectaban restos de esta enfermedad.

La autoridades de China como es tradicional en el sistema comunista, han ocultado muy posiblemente, al resto del mundo una información rápida y veraz sobre la situación de la pandemia, que hubiera evitado miles y miles de muertos.

Es urgente realizar una investigación profunda para poder corroborar estas sospechas que parecen bastante fundadas, el mundo necesita saber la verdad la cuestión no puede ser soslayada

EL RETO ECONÓMICO

 

Tenemos por delante el gran reto de la recuperación económica, después de la grave pandemia del Covid19.

España, se enfrenta a un gran esfuerzo de desarrollo en los próximo meses y necesita estabilidad, mesura, prudencia y sentido común; en definitiva, dar confianza a los inversores pequeños y grandes para poder generar empleo y recuperar la actividad de forma rápida

Sin embargo, no parece que las intenciones del gobierno, sean la mesura y el sentido común, sino más bien. la ocupación de todos los resortes del poder y el continuo cambio de objetivos.

La nave llamada España, navega con una tripulación inexperta, desunida y con intereses distintos, además su capitán parece no reconocer que el estado de la mar no permite experimentos que puedan ser peligrosos.

Esta saliendo capital de este país y apenas llegan nuevos inversores, ante la inestabilidad de la situación política y ante la radicalidad de algunos de los miembros del ejecutivo.

La ayuda financiera de la UE es fundamental, pero de igual manera lo es una buena gestión y aprovechar bien los recursos financieros que lleguen de Bruselas, de lo contrario, será difícil conseguir estabilidad y prosperidad.

Una economía débil, pone en serio riesgo los servicios básicos de una sociedad moderna tales como sanidad, educación y pensiones.

Mucho me gustaría equivocarme por el bien de todos, pero nuestros dirigentes no están preparados para gestionar nuestro inmediato futuro.      

 

NI BLANCO NI NEGRO

 

La muerte por asfixia, que pudimos ver en unas imágenes espeluznantes, en el que el policía apretaba su cuello y dejaba sin respiración a George Floyd, ha desencadenado manifestaciones y desordenes públicos en Estado Unidos y en otras ciudades del mundo.

La imágenes hablan por si solas y no dejan lugar a dudas de lo ocurrido y la

deleznable acción del policía, mientras George Floyd pedía indefenso ayuda y otros policías, no hacían nada por detener la acción.

No es eta la primera vez, ni creo que será la última por desgracia que veamos imágenes similares, también de suma violencia ejercida por el lado de la ley.

Dicho esto, que es del todo condenable, es obvio que este triste y lamentable suceso ha sido utilizado por algunos medios de comunicación cercanos a los demócratas a pocos meses de las elecciones, para desestabilizar a Donald Trump.

No se trata de defender a Trump, ni mucho menos, es más, su actuación ha sido torpe y provocadora, sin embargo, como se ha podido ver también hay otros intereses, que han utilizado de manera vergonzosa la situación, lo que les deja también éticamente en muy mal lugar.

Donald Trump, tiene bastante responsabilidad en esta crisis por su falta de tacto y empatía, pero también una parte influyente de la sociedad norteamericana, que ha aprovechado la situación para extender las protestas y utilizar a muchos jóvenes en su causa.

Muchas personas de raza negra, por cierto no comparten la actitud de aquellos que

con sus medios poderosos, aprovechan la situación para “echar más leña al fuego” y tratar de sacar réditos electorales.

Una importante cadena de televisión muy cercana a los demócratas, ayer mismo informaba de una encuesta en plena crisis en la que ampliamente el candidato Joe Biden se destacaba, con una importante ventaja sobre el actual Presidente y días anteriores de forma continua conectaba con diferentes manifestaciones, dando la sensación, de ser más un medio de agitación que de comunicación

Da asco, como se aprovecha cualquier situación para dividir la sociedad y para dirigirla al enfrentamiento, por lo que vemos, no sólo ocurre en España.

Cada vez hay más medios que parecen dedicarse más al sensacionalismo o a la agitación, que a la información.            

RECUPERAR LA VERDAD

 

Parece evidente que desde el Gobierno, se hace todo lo posible para que parezca que su gestión no ha sido tan mala en la pandemia del Covid -19.

Ya no sólo por el número real de fallecidos por esta enfermedad, cuyas cifras son muy superiores a los datos oficiales, como recogen los Registro Civiles y las empresas funerarias, sino que también como recoge el digital “La Información”, el número de personas que han padecido la enfermedad en muy superior a los 240.000 que recogen los datos oficiales; ya que se han producido 700.000 bajas por incapacidad laboral derivada del Covid-19, según la Seguridad Social.

La cuestión estriba, que se han confirmado por la prueba PCR sólo 210.000 personas, aunque el número de las que fueron aisladas, pero sin prueba PCR fue de 490.000, además sólo se contabilizan en este caso, entre los 16 y 65 años.

La mentira, se esta adueñando de la vida pública de este país con un descaro realmente peligroso, acostumbrando a la sociedad a que no decir la verdad no tiene ninguna importancia, lo que no deja de ser una temeridad y un riesgo de muy grave para nuestra imagen como país y una falta de respeto absoluta a los familiares de los fallecidos por esta pandemia.

Se puede comprobar así, que algunos están dispuestos a superar todo los límites de la ética y la moral hasta ahora conocidos, así se fraguan como recoge la historia muchos conflictos.    

 

 

¿ MANTENERNOS ASUSTADOS ?

 

El control de la pandemia del Covid 19 avanza en Europa, tanto el índice de contagios, pero sobre todo en la fuerza del virus que nos debe hacer optimistas, si se cumple lo que dicen importantes especialistas italianos y de otros países, que dan por finalizado el mayor peligro, al menos en Europa.

Sin embargo, no debemos bajar la guardia, ni mucho menos. En este sentido se debe de seguir manteniendo la distancias física y el uso de mascarilla, así como el

lavado de manos.

Dicho esto, que debe de ser fundamental; no se entiende ahora que España, siga con una medidas tan restrictivas y en algunos casos absurdas, como no abrir las fronteras, como la mayoría de los países de la Unión Europea el 15 de junio y tengamos que esperar al 1 de julio.

Da la sensación que este Gobierno, esta muy cómodo con tanto control y se esta pasando “de frenada”.

Quiere mostrar el Ejecutivo español con estas medidas, que el resto de los países europeos, son unos imprudentes y que los sensatos son ellos, después del fracaso del control de la “pandemia” en España.

El daño que se esta haciendo a la economía y el sector turístico ya empieza a ser innecesario y sólo es fruto de la incompetencia o de otras causas que no se explican.

El virus, ha causado mucho dolor y muerte y por lo tanto se debe de ser prudente, pero una cuestión es la prudencia y otra utilizar la misma, para mantenernos a todos asustados.

 

LA CREDIBILIDAD ES UN PATRIMONIO

 

En cualquier faceta de la vida, es fundamental la credibilidad, la credibilidad, el ser una persona fiable y previsible que cumple sus acuerdos y su palabra, es todo un patrimonio personal.

Lo mismo ocurre a los Estados y a las diferentes Administraciones, necesitan para su buen funcionamiento, ser creíbles y previsibles.

En estos momentos, España como país, está perdiendo su credibilidad, o al menos se pone en serias dudas la misma.

Se duda del número de fallecidos a causa de la pandemia, se corrigen las cuentas y pronósticos económicos presentados en Bruselas, se crea incertidumbre en la apertura de España al exterior, con dudas y cambios.

Es decir, España, esta en su peor momento de imagen ante el mundo.

Para colmo de males, el señor Sánchez forma Gobierno con personajes que justifican el comunismo y el chavismo, con ideas pasadas de moda que nunca han servido nada más que para crear problemas, por lo tanto, se puede explicar bien el complicado momento ante el mundo exterior que vive España.

El señor Sánchez, que cuando llego al cargo vendía un aire de modernidad y de líder joven, ha perdido crédito por sus pactos y vaivenes económicos y por una mala gestión de la crisis del Covid 19.

Europa, nos mira con recelo y con preocupación, cuando precisamente más necesitamos la ayuda exterior.

Parece, que no decir la verdad en algunos lugares, todavía y afortunadamente se penaliza, cuestión que aquí no ocurre para desgracia nuestra.

 

MEMÓRIA

 

Un pueblo que no tiene memoria, es un pueblo muerto socialmente.

Esto es lo que parece pretender el Gobierno de España, al no contabilizar bien los fallecidos por la pandemia del Covid 19.

El continuo “baile” de cifras, absolutamente inexplicable desde el más básico sentido común, sólo puede pretender tapar la gran tragedia que esta pandemia ha generado en España y que nos sitúa a la cabeza del mundo en fallecidos por millón de habitantes.

En una falta de escrúpulo digna de análisis, se quiere hacer creer que lo negro es blanco y lo blanco es negro.

Se falta a la verdad de forma continua y evidente, tomando a la ciudadanía como súbditos de un Gobierno, que parece esta dispuesto políticamente “a todo” por mantener el poder.

El daño que se esta haciendo a instituciones de todos, como la Guardia Civil, la Abogacía del Estado, la Fiscalía y otras, sólo se puede calificar de muy grave e irresponsable.

Los ciudadanos de bien, sean de la ideología que sea, debemos de reaccionar con la máxima moderación y responsabilidad, pero también debemos estar atentos, pues pueden estar poniéndose “en juego”, principios básicos que ya dábamos por asentados y firmes.

En el peor momento de la historia reciente, nos encontramos con un Ejecutivo que

que no es capaz de pedir perdón de sus errores, ni de enmendarlos, lo que cada vez le llevará a seguir en una espiral de “huida”, muy peligrosa para la convivencia y la concordia. Que el Señor nos proteja.    

UNA SOCIEDAD “TAMBALEANTE”

 

La falta de valores transcendentes, el egoísmo humano, la injusticia, la falta de respeto al diferente; están entre otras causas, junto con la mentira entre los males que acechan esta sociedad que se “tambalea” y se resiente en diferentes partes del mundo.

La violencia, por lo general viene motivada por distintos pecados del ser humano, como hemos podido conocer a través de la historia y en definitiva por la negación del bien.

Cuando los seres humanos, sólo miramos hacia lo material y no tenemos una estructura mental de valores, procedemos de manera animal, sin ningún tipo de freno y de cortapisa.

En realidad, en estas circunstancias se pone al máximo el instinto más primario del hombre y la mujer, que junto al relativismo, es una de las causas más importantes de generación de violencia en diferentes versiones, tanto física como verbal.

El relativismo al que me refiero, anida en todo ser, pero en la actualidad aún es mas preponderante por una falta de valores religiosos y éticos que al menos lo frenen y lo reconduzcan.

Así, la sociedad actual, en este estadio de cosas, sólo actúa por interés propio y se olvida de la justicia y de la verdad, adaptando la razón a su propio y único interés, sin darse cuenta del daño que puede generar.

La fe cristiana como tal, nos ayuda a la hora de discernir esta situación, aún dentro de nuestras carencias humanas, diríamos, que es el mejor andamiaje a la hora de detectar el bien y el mal en nuestro caminar diario.

Si esta sociedad, no recupera valores, nuestro futuro estará seriamente amenazado por las disputas, las guerra y la injusticia.