NO SOMOS CULPABLES

 

Se está aprovechando, quiero suponer involuntariamente, la responsabilidad de las personas de bien en torno a las medidas de protección respecto al virus “chino” para insuflar miedo.

Si, parece que los ciudadanos somos los culpables de que exista este virus y para ello nos sacan imágenes de grupos aislados e irresponsables que no cumplen las normas y hacen “botellón” o fiestas privadas, cuando lo cierto es que la mayoría de la personas son responsables.

Se nos está inyectando en vena no sólo miedo, sino sentido de culpabilidad, algo grotesco si no fuera porque es una manipulación en toda regla de los sentimientos humanos más nobles.

No, claro que no somos culpables de nada, la inmensa mayoría de los ciudadanos y si lo son aquellos políticos ineficaces y mentirosos que toman medidas draconianas y que no supieron ver la llegada de la enfermedad y tomar medidas previamente.

Los ciudadanos no sólo somos culpables de nada, sino somos los que sufrimos las políticas descabelladas en materia sanitaria que parecen por ejemplo haber olvidado la medicina preventiva.

Un poco de respeto al sentido común por favor

PEDIR RESPONSABILIDADES

En una información muy interesante de El Diario Montañés, se recoge que dos de cada tres personas fallecidas el pasado año en Cantabria por COVID eran personas que estaban en residencias.

Este hecho, demuestra varias cosas: por un lado que no funciono en absoluto el sistema sanitario, ni la coordinación con la residencias.

Por otro lado, la deficiente información facilitada por China, hizo que no se conociera la gravedad de la enfermedad, ni los tratamientos, no hay que olvidarse que a mediados del mes de Enero la OMS decía que el COVID no se podía contagiar de persona a persona, también que muchas residencias se quedaron desbordadas por falta de atención sanitaria y por el propio contagio del personal, quedando patente que no tenemos unos de los mejores sistemas sanitarios del mundo ni mucho menos y que un cumulo de causas que hubieran sido evitables hizo que murieran muchas personas solas y sin una atención digna.

En cualquier país serio se abriría una investigación sobre el sistema sanitario y sus fallos, sobre los responsables políticos, que después de tal “descalabro”, sólo hablan de confinar, prohibir, culpar en vez de prevenir, curar, dar esperanza y tomar medidas que la sociedad entienda y valore.

Los datos son demoledores, nos hablan de segunda ola, tercera ola y pronto nos hablaran de cuarta ola; pero la verdad es que el “tsunami” autentico se produjo en marzo, abril y mayo, me refiero en fallecimientos, y ahora nada es comparable con aquello afortunadamente por lo que se debiera de dejar de “meter miedo” a todas horas y empezar a dejarnos vivir y trabajar.      

INCAPACES DE IMPLEMENTAR MEDIDAS NECESARIAS

Tenemos un Gobierno de España, rehén de la extrema izquierda, e incapaz de implementar las importantes reformas que necesita España, para poder ser en el futuro un país viable nada menos.

Vemos, que las reformas que por un lado el propio Gobierno promete a Bruselas a través de la señora Calviño a los pocos días desaparecen, porque Podemos boicotea ante Sánchez cualquier reforma coherente.

El Presidente del Gobierno, el señor Sánchez, es consentidor de tal situación con tal de seguir un día más en la Moncloa. En un acto de irresponsabilidad el Presidente del Ejecutivo, no tiene ningún plan para sacar este país de la situación de crisis y mucho menos para controlar el continuo aumento de la deuda que es “la soga con lazo corredizo” que nos acabará asfixiando.

No se si la señora Calviño y el señor Escrivá debiera de dimitir, igual prefieren hacer “un Solbes” y “tragar” con todo, lo que les haría cómplices del desastre que se avecina.

No tiene recorrido sensato este Gobierno, sólo un recorrido el utilizar el BOE y tener contentos a algunos medios de comunicación que no están cumpliendo con el deber de informar de lo que está ocurriendo y avisar a los españoles de tanto desaguisado.

Los españoles, vivimos un momento crítico: un Gobierno, sin capacidad de políticas sensatas, con una oposición muy débil y sin criterio y unos medios de comunicación en su gran parte, como dice José María García, poco más que “quebrados”, es decir, tenemos la tormenta perfecta para que todo salga mal.

Sólo la voluntad de los españoles de bien y la ayuda del Señor, nos puede salvar.

DE VACACIONES

La falta de vergüenza de una parte importante de la clase política, en altas instancias, roza la “cara dura” .

Ya sabemos que en Enero hay vacaciones parlamentarias y no es habitualmente un periodo hábil de sesiones en el Congreso de los Diputados, salvo excepciones; pero en España, vivimos una excepción al estar en medio de una pandemia con miles de personas en ERTES, con la hostelería y el comercio en situación limite y con muchos problemas de diversa índole.

“Los diputados, están cansados, están agotados de tanto trabajar y sufrir por los españoles”.

El Gobierno, no quiere control parlamentario, no quiere que nadie le lleva la contraria y la oposición esta escondida, esta en la estrategia, como hace el PP, sin darse cuenta que no es tiempo de estrategias, ni de marketing, sino de propuestas y defensas de idea y valores.

Así no salimos de esta crisis, con una clase política inoperante y para colmo unos medios de comunicación, incapaces de contar tanta incompetencia.

Ni Sánchez, ni Iglesias, ni Casado, ni Abascal, ni Arrimadas, están dando la talla ante una situación tan grave como la que vivimos.

A todos ellos si que habría que mandarles al ERE definitivo.

España, necesita políticos capacitados y con conocimientos, capaces de decir la verdad y transmitir ilusión y certezas a una sociedad al límite de sus fuerzas.

 

¿LOCURA?

Estamos llegando a “la locura”, al extremismo de decisiones no comprobadas y a claras vulneraciones de la Constitución; alguien debe de actuar, la sociedad debe e despertar.

Resulta, que en los autobuses urbanos e interurbanos de La Rioja según acabo de leer, se va a prohibir hablar a los viajeros y hablar por teléfono.

No tienen los políticos ni técnicos soporte legal alguno, ni soporte moral, pues es algo que nadie ha comprobado.

Sin querer comparar este tipo de decisiones, parecen más de dictaduras tremendas y de estados totalitarios.

Los derechos humanos, la Constitución, los diferentes tratados internacionales son vulnerados y es necesario que alguien pare todo esto.

Me pregunto que hacen estos periodistas de radio, televisión y prensa importantes, que tienen grandes contratos, me refiero a ellos porque al contrario de la mayoría de los profesionales que reciben un salario mas bien pequeño, si tienen poder para denunciar la vulneración de derechos y libertades y para buscar la verdad.

¿Me pregunto si no quieren la defensa de la libertad?.

 

SI LES AFECTASE A ELLOS SERÍA OTRA COSA

Mientras comerciantes, pequeños empresarios de hostelería, trabajadores, se ven con gravísimos problemas económicos, debido a las medidas de restricción de horarios y cierres impuestos por las Comunidades y el Gobierno, que les impide ganarse el pan honradamente; los que dictan esas ordenes y sus supuestos asesores, cobran su buenos salarios públicos puntualmente y se permiten tomar medidas sobre la vida, la libertad y la hacienda de los demás, con el aplauso de unos medios de comunicación generalmente cómplices.

Si, cobran tranquilamente, aumentando mes tras mes la deuda pública de España, que es de todos, dejando el país endeudado para décadas.

Estoy seguro, reconozco que no deja de ser una opinión personal, pero basada en el sentido común, que si la economía estuviera abierta, el desarrollo de la pandemia no sería peor y se hubieran tomado decisiones mucho más ecuánimes como piden reiteradamente científicos de primera línea (premios Nobel incluidos) y que no sólo no se escuchan, sino que se impide que se conozcan por parte de la gran mayoría de la población, lo que no deja de ser gravísimo.

Me supongo que involuntariamente, quiero pensar, se esta cometiendo una masacre social, condenando a millones de personas a la pobreza y haciendo desaparecer a miles y miles de empresas.

Propongo que por cada decisión que suponga quitar derechos y libertades, se reduzca en un diez por ciento el salario de estos políticos, asesores y funcionarios que toman tales medidas, que así padezcan en sus propias “carnes” el sufrimiento al que están sometiendo a la sociedad injustamente. Estoy seguro que pronto las medias tan drásticas y absurdas desaparecían.  

LA INMUNIDAD POST COVID

La inmunidad al coronavirus, después de haber padecido la enfermedad puede durar años e incluso décadas, según desvelan algunos estudios.

Ocho meses, después de haber sido infectado, la mayoría de las personas que se recuperaron tenían suficientes células inmunes para repelerá el virus y evitar así la enfermedad.

Según algunos estudios, al parecer esa cantidad de memoria podría evitar que , durante muchos años, la amplia mayoría, de las personas adquieran la enfermedad deban de ser hospitalizados.

Por otro lado la revista NATURE, acaba de publicar un estudio días pasados en un trabajo realizado sobre 87 personas que habían tenido la infección del COVID-19, en lo que se comprueba que lis niveles de células B de memoria específica(cuya misión es defender al organismo de futuras agresiones de ese mismo patógeno generando anticuerpos contra el SARS-COV-2) se mantuvieron constantes durante el periodo de estudio.

El estudio de la Rockefeller University de Nueva York, sugiere que las personas que han estado previamente infectada con el SARS-COVID-2 pueden generar una respuesta rápida y eficaz al virus si vuelven a exponerse.

Es decir el sistema inmunológico del ser humano responde a la infección produciendo anticuerpos que pueden neutralizar específicamente al agente infeccioso.

También se ha demostrado que los anticuerpos humanos contra el SARS-COV-2 protegen contra la infección en modelo animales.

Ahora pregunta esta en que función puede tener la vacuna en las personas que ya han pasado la enfermedad y si será necesario vacunar a estas personas.

Es curioso como se esta vacunando a personas que han padecido la enfermedad y tienen anticuerpos, cuando muy posiblemente sea innecesario.

Lo aclaran o no quieren aclararlo.

¿NOS ENGAÑAN CONTINUAMENTE?

Nos engañan continuamente o por lo menos actúan “a ciegas”.

En pleno invierno con las ciudades “muertas” sin actividad, los ciudadanos vemos mermados nuestros derechos constitucionales, sin que ningún partido diga nada, sin que se respeten nuestro derechos más fundamentales.

¿Qué informe contrastado dice que estando encerrado en casa a las ocho es beneficioso para controlar el COVID-19?.

Sencillamente no existe, es una “paranoia”, una idea descabellada para tenernos más controlados, cuando no hace falta, no hay nadie por la calle, estamos en invierno.

Nos quieren volver “locos”, nos quieren tener en tensión, nos están haciendo un daños psicológico tremendo infinitamente mayor que la propia pandemia.

Están manejando nuestro derechos, sin el menor respeto al “sentido común” como si se tratará menores de edad.

Han atemorizado la sociedad de tal manera, que la han dividido y algunas personas, se han convertido fruto del miedo y de la desinformación en pequeños “inquisidores”.

En vez de trabajar en la protección real de la personas con más riesgo, en vez de dar esperanza y futuro se dedican al miedo, al terror y en algunos casos a la exageración directamente.

No parece fruto de la casualidad.