UNA “LEY” PARA DIVIDIR

 

 

La llamada Ley Celaa, la Ley de Educación, que este gobierno quiere implantar sin consensos y de forma provocativa es un insulto a la inteligencia humana, un ataque a los derechos individuales tan importantes, como el elegir centro educativo ó el idioma de todos los españoles.

La Ley de Educación, patrocinada por la multimillonaria Ministra de Educación , deberá ser cambiada en cuanto llegue un nuevo Gobierno, que quiera el consenso y no la colonización ideológica.

Esta Ministra, que envió a sus hijos a los mejores Colegios del País Vasco, es una incoherente y una persona con tintes totalitarios, eso si siempre hacia los demás como es habitual en este tipo de personas.

El Gobierno, prefiere una sociedad con pocos conocimientos, poco libre e incapaz de pensar por si mismo; en definitiva, un carácter casi totalitario que anula derechos y que pretende dirigir vidas y conciencias.

Debemos reaccionar con valentía y sin miedo, con respeto a las ideas ajenas, pero exigiendo el mismo respeto hacia nuestra propias ideas.

La convivencia se basa en la tolerancia y en el bien común y no en los experimentos ideológicos cargados de mentiras.