Autor: Gervasio Portilla

El señor Iceta, dice que en España hay hasta ocho naciones, que él ha contado.

Lo dice, se queda tan tranquilo y a otra cosa.

Estamos rodeados de políticos frívolos, egoístas e incompetentes.

Si toda la clase política incompetente volase, se produciría un autentico caos aéreo sobre nuestro territorio.

Es tan grande el egoísmo y la irresponsabilidad de algunos, que están dispuestos a cualquier cosa con tal de seguir viviendo muy bien a cuenta del erario público.

El señor Iceta, insulta al sentido común y muestra su falta de visión de la realidad, sometida a las “cuatro paredes” de Cataluña, estos señores, creen que el mundo empieza y acaba en Cataluña, una sociedad por cierto en profunda crisis y de “capa caída”.

Que pecado hemos cometido la mayoría de los españoles, para tener que aguantar con perdón “las sandeces” de estos personajes un día si y otro también.

Sin embargo, el problema real no esta sólo en estos personajes, sino en una parte de la sociedad, mal formada, intoxicada informativamente y llena de mentiras, que permite que sigan existiendo políticos tan irresponsables e incapaces de gestionar un país en concordia y libertad.

 

Los dirigentes de Cataluña y del País Vasco, pretenden seguir teniendo más y más privilegios, rompiendo la unidad de la nación española y la propia igualdad de los ciudadanos en derechos y obligaciones.

Detrás de todo ello, se esconde la mentira y el egoísmo antropológico de una ideología perversa.

Ahora más que nunca, con un gobierno débil y en manos de los que quieren romper España, se debiera de articular una fuerza política unitaria capaz de frenar electoralmente tal vulneración de derechos y libertades de todos los españoles.

No es momento de “egos”, ni de siglas sino de conceptos básicos y fundamentales.

Los partidos que quieran defender de verdad la Constitución Española, debe de unirse, al menos, durante un tiempo para hace frente a la vulneración de la ley por parte del independentismo.

Los partidos del centro derecha, deben de apartar sus diferencias y también a aquellos personajes, que por su peculiaridad no suman sino que dividen, algo que España. en el momento actual no se puede permitir.

Por otro lado, la sociedad en su conjunto debe de reaccionar, antes de que sea demasiado tarde, dada la gravedad de la situación que vivimos.

Hay muchas cosas en juego: La igualdad de los españoles, la libertad, la unidad nacional, la Constitución del 78 y hasta una convivencia pacifica, quien no quiera ver estos riesgos, estará incurriendo en un gravísimo error o en una irresponsabilidad.

 

Si el supuesto caso de corrupción que denuncian los ex abogados de Podemos, llegara a confirmarse, siempre hay que defender la presunción de inocencia, aunque esto tiene muy mala pinta, sería un comportamiento un más en la larga historia de corrupción del comunismo.

Alexander Solzhenitsin, recoge perfectamente en su libro “Archipiélago Gulag” la corrupciones comunistas en medio de pobreza general, recoge sus fiestas, sus bacanales, en definitiva sus miserias.

En la Unión Soviética, era prácticamente imposible para un occidental hacer negocios, sin “chanchullos” con los altos dirigentes de aquel régimen; en realidad es un práctica que parece también continua en la actual Rusia, donde es necesario crear empresas mixtas y todo son problemas y burocracia.

Nadie debe de asustarse, si llegará a confirmarse, lo que denuncian los que fueron abogados de Podemos, en el ADN comunista y de la ultraizquierda, esta la mentira y el relativismo, en definitiva es el ultra capitalismo al revés; es el mal en si mismo.

 

 

 

España va por muy mal camino, merced a la irresponsabilidad de algunos políticos que toman su actividad como algo “frívolo” y lejos de cualquier respeto a las leyes y a los ciudadanos que en su día las votaron, como es el caso de la Constitución.

El que la señora Batet; Presidenta del Congreso de los Diputado, haya permitido formulas estrafalarias y creo que ilegales, en la toma de juramento o promesa de los Diputados, es un escándalo en toda regla y el Tribunal Constitucional debiera inhabilitar a los diputados que han aplicado esta formula y a la propia Presidenta de la Cámara, que debiera también rendir cuentas de su permisividad, lo que representa un insulto a los españoles, que procuramos cumplir la ley.

Esta serie de personajes, por acción y omisión quieren convertir las democracia española es un “esperpento” devaluando al máximo su funcionamiento para luego tratar de desautorizar sus leyes.

Algunos y algunas quieren hacer de España un país ”bananero” y sin credibilidad algo que no se puede consentir, detrás de todo tienen un único objetivo destruir la unidad de la nación.        

Acabamos de conocer los datos del paro del mes de Noviembre, que son los peores a nivel de España desde el año 2.013 con 20.525 personas más en  desempleo y 53.115 afiliados menos a la Seguridad Social.

La actividad económica se esta parando poco a poco, aumenta el déficit de las Administraciones Públicas un 14,4 por ciento respecto al año anterior y según la central de Balances del Banco de España, el beneficio de las empresas no financieras cayo un 44,5 por ciento.

Mientras; el señor Sánchez trata de conseguir un pacto con los que quieren destruir España, no tiene medidas económicas para relanzar la economía, sólo gastar más en gasto corriente y la mayoría de los medios de comunicación miran hacía otro lado y nos distraen con otros temas de menor interés.

No se ha visto más irresponsabilidad en la clase política, periodística y económica en España en los últimos cuarenta años.

Parece la “tormenta” perfecta en medio de una sociedad manipulada, mal informada y sin valores.

Pobre España, nunca en cuarenta años hemos tenido una clase política tan irresponsable egoísta e inepta en términos generales. Todo muy grave.

Preservar el planeta es deber de todos, y todo lo que se pueda hacer para mejorar la calidad ambiental y preservar la vida del planeta es poco.

Dicho esto, nada tiene que ver la sobreactuación política sobre esta materia, una sobreactuación, muchas veces basada en la exageración y en la manipulación.

La última moda es culpar a la aviación comercial de la contaminación, lo que no dejar de ser una exageración o una falsedad directamente, pues hay otras causas más localizadas en factorías y grandes poblaciones sobre todo de China, India y Rusia.

Copiado del muro de un piloto comercial y comentando este asunto, podemos decir:

Un vuelo Madrid -Buenos Aires en un Airbus 350 puede consumir, unos 70.000 kilos de queroseno, transportando 350 pasajeros y recorriendo 5.560 millas (10.000 km) que separan a ambas capitales.

Si dividimos, nos sale que cada pasajero consumió 2 Kg de queroseno cada 100 kilómetros, todo ello a una velocidad de crucero de aproximadamente 900 kilómetros hora.

Todo ello, sin contar la carga transportada, que haría que el consumo bajara de los 2 Kilogramos cada cien Kilómetros.

Los datos son demoledores y demuestran, que los aviones no son ni de largo el medio que más contamina, una prueba evidente de la manipulación de la sociedad por parte de intereses poco claros.

Cuidar el medio ambiente, es responsabilidad de todos, y una obligación de primer orden, pero no con exageraciones ni con falsas modas, sino con responsabilidad y denunciando a los países que más contaminan aunque a eso no se atreven la mayoría de los demagogos casi siempre buenos amigos de China y Rusia.    

 

 

La máxima debilidad del llamado gobierno “Frankestein”, situaría a España en una coyuntura de suma gravedad, debido a las diferencias de trato hacía Cataluña y el País Vasco, en detrimento de el resto de las Comunidades.

En realidad, sería premiar, la permanente deslealtad y el “chantaje” nacionalista, lo que dejaría sin sentido al propio sistema.

El sistema Autonómico, se basa en el consenso y en la lealtad institucional, si se rompe mediante la presión política y el desacato a la Ley, el sistema entrará en colapso.

Un gobierno dispuesto a todo con tal de seguir en el poder, puede ser un gobierno que al final acabe siendo directa o indirectamente desleal a la propia Constitución que precisamente le da su sentido y legalidad.

Nada que suceda en Cataluña o en el País Vasco y que afecte al resto de España, puede ser ajeno al resto de los españoles, por lo tanto, si el gobierno mediante cesiones o tratos, entrará en esa fase estaría pisando no sólo un “suelo resbaladizo”, sino que pudiera llegar a la ilegalidad y en tal caso también su propia legalidad estaría en juego, con las consecuencias consiguientes.

Me gustaría pensar que Pedro Sánchez, conoce bien las líneas que no puede atravesar, aunque a tenor de su obsesión por el poder y su falta de criterio y sensatez parece dispuesto a todo y eso sería muy grave no sólo para su persona, sino lo que es peor, para los españoles que queremos vivir en paz y libertad.

 

Condiciones fundamentales para ser un político del siglo XXI.

El político de hoy, debe de ser capaz de mentir de forma reiterada sin ningún tipo de rubor.

También, debe de ser capaz de aplicar perfectamente el relativismo, utilizando siempre la táctica de la incoherencia permanente y juzgar siempre de acorde a los propios intereses, sin importarle la verdad.

El político actual, debe de ser capaz de utilizar palabras huecas que parezcan que significan algo pero que realmente no significan nada.

Al político de hoy, no le debe importar no conocer la historia, porque siempre adaptará la misma a su beneficio, buscando autores que sean acordes a sus intereses.

El político de hoy, debe de olvidarse de experiencias anteriores de otros y pensar que la historia comienza con sus ideas, debe de ser capaz de practicar “el Adanismo”.

Al político de hoy, le debe de hoy importar “un pimiento” destrozar al adversario de la forma que sea a través del infundio y la intoxicación informativa.

En definitiva, el político de hoy debe de pensar única y exclusivamente sólo en una cuestión: mantenerse en su cargo a costa de lo que sea.

Obviamente, hay muchos políticos y políticas que no actúan así pero empiezan a ser casi la excepción, que confirma la regla.

Nota: cualquier parecido con la realidad actual es mera coincidencia.

 

 

 

El mal existe y es muy dañino y sibilino. El mal existe. aunque una parte importante de la sociedad no lo reconozca o quiera obviarlo.

El bien, que evidentemente es contrario el mal, mantiene una lucha permanente contra el imperio del mal que acecha y destroza.

El mal, se presenta sin embargo, de forma encubierta y engañosa, como si fuera un gran pastel, algo apetitoso, aunque acabe siendo muy dañino y venenoso.

El mayor riesgo que tiene la sociedad actual, es no ser consciente de la existencia del hecho maligno, por lo que se hace más difícil combatirle.

El mal, se cuela en la familia, en la empresa, en las instituciones políticas y también en la propia Iglesia como los diferentes Pontífices han advertido.

Una de los grandes expresiones del mal en esta sociedad que nos ha tocado vivir, es la mentira y el relativismo.

Se miente de manera continua, incluso sobre asuntos muy importantes para la propia convivencia humana, el ejemplo más claro lo tenemos en la vida política, donde la mentira se ha convertido en algo habitual que hasta la propia sociedad no condena, lo que nos llevará a la desestructuración social, a una especie de “locura” colectiva.

El relativismo, la aplicación de normas y maneras a conveniencia, sin tener una medida justa que se aplique siempre, es otro desastre social que destroza nuestras vidas.

El mal, hay que combatirlo con el bien, poniendo en práctica los

mejores sentimientos de ser humano: la solidaridad, el perdón, la justicia, la caridad, la amistad; en definitiva el amor al prójimo.

En nuestro trabajo, en nuestras familias, en la política, en cualquier acción donde este el ser humano se encuentre, debemos hacer el bien.

Es verdad, que todos somos víctimas del pecado estructural, el pecado que es de todos y no es de nadie, es el pecado de una sociedad injusta, mentirosa, egoísta y de la que todos somos en mayor o menos medida víctimas aunque muchas veces tampoco seamos conscientes.

Un Gobierno en el que estén miembros de Podemos, puede resultar un peligro para la seguridad nacional.

Aunque el señor Sánchez, cree que puede “blindar” los llamados Ministerios de Estado y las carteras que controle la formación de Pablo Iglesias, no tengan la misma importancia, en los Consejos de Ministros se conocen y se debaten asuntos de vital importancia y que afectan a la seguridad nacional.

Que confianza, se puede tener en unas personas que tienen relaciones tan fluidas con Irán ,Venezuela, Cuba y que tienen como objetivo último romper la Constitución y por lo tanto el actual sistema político.

Me pregunto si el PRC, Coalición Canaria, Teruel Existe, no son conscientes de la responsabilidad que van a contraer si apoyan un gobierno en estas condiciones.

La libertad, la paz y la credibilidad de España como nación libre y democrática de occidente esta en juego y si finalmente se produce como hecho consumado tan peligroso pacto, habrá que pedir responsabilidades, no sólo a Pedro Sánchez, sino también a aquellas fuerzas que con su voto colaboraron en este empeño tan peligroso.

Luego no servirá, esconderse y decir que sólo se buscaba la estabilidad de un Gobierno; sólo desde la ignorancia o desde la imprudencia temeraria, se puede apoya un Ejecutivo tan peligroso para España.